Consejos de apuestas para hoy

En el partido aplazado de la 16ª jornada de la Primera División danesa, Esbjerg recibe al colista Middelfart en el Blue Water Arena. El equipo local ocupa la sexta posición tras 15 jornadas, justo en el límite del grupo de ascenso, por lo que cada punto tiene una importancia crucial. En sus últimos cinco partidos en casa ha logrado tres victorias y dos empates, mostrando regularidad ofensiva – el más reciente, un 3–2 frente a B93 Copenhague. Su ataque, liderado por Lasse Vigen y Muamer Brajanac, atraviesa un buen momento de forma, mientras que la defensa, aunque concede algunos goles, se mantiene sólida en los momentos decisivos. Middelfart, por su parte, llega con un registro desastroso: todavía no ha ganado fuera de casa esta temporada, con cinco derrotas en siete partidos como visitante, doce goles encajados y solo tres a favor. Además, no ha marcado en sus tres últimos encuentros fuera, lo que refleja su actual ineficacia ofensiva. A pesar de no tener bajas, el equipo muestra poca organización táctica y un nivel de confianza muy bajo. Esbjerg sabe que una victoria podría impulsarlo hasta el segundo puesto y consolidar su posición en el grupo de ascenso. Por la forma local, la calidad del plantel y la motivación, todo apunta a un triunfo claro del conjunto anfitrión.

En el estadio Chedly Zouiten se enfrentan dos equipos de la parte baja de la tabla de la Ligue Professionnelle 1 tunecina, aunque con dinámicas diferentes. El conjunto local, JS El Omrane, ocupa la novena posición con 16 puntos y busca alejarse de la zona de descenso, mientras que Olympique Béja, tras una serie de derrotas, es el colista. El Omrane sufrió una dura derrota 0–4 ante Espérance Tunis, pero en casa mantiene cierta estabilidad: cinco goles marcados y tres partidos sin perder en sus seis más recientes. La figura clave es el delantero Habib Taha, con olfato goleador y capacidad para decidir partidos. Béja atraviesa un momento crítico, con tres derrotas consecutivas y un balance total de 0–9. Su defensa muestra muchas debilidades, especialmente en jugadas a balón parado, y su ataque carece de efectividad – solo ocho goles en trece jornadas lo dicen todo. A pesar de contar con todos sus jugadores disponibles, el equipo carece de cohesión táctica y de confianza. Los locales tienen más energía, combinan con mayor velocidad y están decididos a redimirse tras la goleada de la última jornada. Si repiten el nivel mostrado en la victoria ante JS Kairouanaise, deberían imponerse con claridad.